Nube y Agua

Nube y Agua
El desapego de las nubes...la humildad del agua

lunes, 25 de marzo de 2024

Haikus de lluvia

                    Lluvia mansa.

            Cómo brillan las ramas

                     en el manzano 

Cesa la lluvia.
El canto de unos mirlos
por aquí cerca

Txirimiri
El ruido de un avión
que no se ve

 

domingo, 24 de marzo de 2024

Mi pequeño maestro zen , (de cuatro patas)






 
  Tal día como hoy, el año pasado, la Tierra había dado la vuelta al sol 70 veces desde que nací. Era la primera vez que me pasaba. A tal efecto mi familia, a pesar de que ya no soy muy amigo de grandes regalos, decidió impresionarme. Después de entregarme varios regalos hechos por mis hijas con gran cariño e imaginación, me entregaron un paquetito plano, como un libro, pero más delgado. Conforme lo habría empecé a imaginarme lo peor... ¡Un perro! Me encantan los perros pero desde que murió en 2020 mi perrita Tuka ya había decidido que no habría más perros en mi vida. Algunas veces, me habían comentado que me lo iban a regalar, pero mi respuesta "¡¡¡ Ni se os ocurra!!!" no dejaba lugar a dudas. Mi señora, esposa,  pareja, mujer, o como se diga  tampoco estaba por la labor y eso pesaba... 
   No valió de nada. Me encontraba con la cartilla en la mano murmurando "pero si había dicho que no...". En ese momento se abrió una puerta y entró como un caballo desbocado un cachorro de Beagle de dos meses, que sorteando sillas y personas y nietos, se vino directamente hacia mí y se me subió encima dándome lametones. Me desarmó. -Tu y yo nos vamos a llevar muy bien, le dije sin poder reprimir alguna lágrima. 
- Te vas a llamar Blanik. Blanik es un modelo de planeador que se utilizo ampliamente como avión de escuela y fue  en el que hice mi primer vuelo del curso en 1969

   Los comienzos no fueron fáciles. Estos cachorros tienen una mirada que te desarman (ver foto), pero también un sistema digestivo muy activo y un aparato urinario muy eficiente. Esto se suele obviar cuando uno se enamora de la mirada de estos cachorros y se los lleva a casa, pero es a la larga lo que más "disfrutas". Esto unido a una hiperactividad increíble, unos dientes unos dientes como alfileres y unas uñas expertas en desgarrar pieles, hizo que mis brazos y piernas parecieran sacadas de la película de la Pasión de Mel Gibson durante unos meses. Por otra parte era una especie de tiranosaurio bonsái con un carácter "recolector destrozador". Robaba servilletas, cojines trapos de cocina mordía (y destrozaba), patas de silla almohadones esponjas... Se subía a las mesas donde había comida... De pasearlo me creció un brazo... A pesar de su mirada, más de una vez empecé a hacer gestiones para devolverlo o buscarle un dueño acorde con su carácter impetuoso. En una época de la vida en que uno quiere ya problemas los justos el dichoso perrito la había alterado de forma escandalosa. No lo aguantaba. ¿Qué necesidad había...? era mi frase repetida
   Sin embargo, sin saber por qué, un día todo cambio en mi cabeza. Le había tomado, de repente, un gran cariño. El perro seguía siendo un trasto pero ya no me importaban tanto sus trastadas, o intentaba evitarlas en lo posible anticipándome. Seguía robando cojines, pero me encantaba la cara de pillin que ponía en el acto. Poco a poco empezó a estar más tranquilo. Se me subía encima en el desayuno y se me quedaba dormido en mis piernas o me apoyaba la cabeza en el pecho, me lanzaba una mirada irresistible o me comía a lametones. Nuestros paseos empezaron a ser manejable y cada vez más largos. nos apuntamos a un centro de adiestramiento (¡gracias Dequiresa!), que nos ayudo a entendernos a la perfección. Desarrollé una gran paciencia que me ha servido para otras circunstancias y su trato me genera una gran ternura. Es un pequeño gran maestro zen que me saca mis fallos y suaviza mi carácter.
Un pequeño, gran maestro zen, que todas las mañanas cuando lo levanto me recibe como si hubiésemos estado separados mucho tiempo.
   Comprendo que para quien no tenga perro esto que comento sea excesivo, puede ser, qué le voy a hacer...





El encuentro





Esa mirada...


 

jueves, 21 de marzo de 2024

¡Primavera!


De camino al trabajo suelo pasar por un parque público que en otoño se llena de hojas secas, a las cuales fotografió para pintarlas. A veces la gente se me queda mirando con cara de curiosidad, como pensando " cosas de viejo". En primavera y antes, hay un ciruelo que hace lo que puede por florecer ante la indiferencia de los viandantes. Hace una semana, algunas flores intentaban con timidez abrirse. Hoy que oficialmente ya es primavera he pasado a agradecer su esfuerzo. Eso de florecer es un trabajo complicado. Yo, de hecho no lo he conseguido nunca ...
¡Primavera!
Presentar mis respetos
al pruno del parque
 

miércoles, 13 de marzo de 2024

Alzar la vista


Al alzar la vista y mirar al cielo te puedes tropezar con maravillas que nos suelen pasar desapercibidas por estar entretenidos con lo que ocurre a nuestro limitado nivel. En cierto modo renunciamos a la tercera dimensión, vagando en un mundo bidimensional bastante zafio. Pero si levantas la vista...
 

lunes, 11 de marzo de 2024

Primeras flores

 Procuro ir caminando a la oficina. Son poco más de tres quilómetros, más la vuelta. No es mucho pero procuro aprovechar las ocasiones para mantener cierta forma física 

En esta época me gusta disfrutar de la floración de los frutales urbanitas. Primero los ciruelos, luego los naranjos, que llenan las calles de Murcia de olor a azahar.

Este año los ciruelos que conozco andan un poco retrasados en florecer. Pero hoy por fin he descubierto las primeras flores en mi ciruelo preferido, un tanto tímidas.

Por lo menos hasta ahora las estaciones se siguen sucediendo, como hitos del paso del tiempo, que me recuerdan,(aunque me niegue a "dejar entrar al viejo"), que falta menos para convertirme en "mil vientos". La vida...


Primeras flores 

en el pruno del parque .

Pasó un año





sábado, 9 de marzo de 2024

domingo, 3 de marzo de 2024

Quedarse sin palabras

 Procuro dar un largo paseo por la tarde con mi maestro zen de Cuatro patas.  Procuro que sea a una hora cercana al crepúsculo ya que tengo debilidad por disfrutar las puestas de sol.

Ayer ya vi que la puesta de sol prometía. Hacia el oeste había nubes de viento pero dejaban un hueco entre el horizonte y ellas, por donde el sol en su momento las iluminaria por debajo con tonos amarillo,naranja, rojizos...

No me equivoqué, solo que el espectáculo sobrepaso cualquier expectativa. Por unos minutos, ¡Que minutos! la nube gris y las gotas que se desprendían de ella se volvieron doradas emitiendo el cielo una luz increíble.

Empiezo a creerme que cada momento de la vida es un milagro...

Puesta de sol.

Volver la vista atrás

cada pocos pasos






lunes, 16 de octubre de 2023

DISONANCIA,VENTANAS Y CAMBIO CLIMÁTICO

 


             Llevo tiempo sin escribir ninguna entrada en el blog. Y no es que no haya temas, más bien lo contrario. De hecho, la realidad cotidiana se llena de guerras, odios, enfrentamientos verbales, (el escalón previo a los físicos), aberraciones climáticas…etc. Observo con pavor el sesgo de los medios generalistas a la hora de dar noticias, que parece que más que informar, quieren formar, (un estado de opinión indignado y agresivo). Estoy superado.

Un tema, al que se le sigue sin dar el tiempo y la importancia necesarios es el cambio climático y eso que su evolución puede acabar con la sociedad, tal como la conocemos, tal vez incluso la vida humana o incluso la vida sobre la Tierra. A lo mejor estoy demasiado sensibilizado por las informaciones que de aquí y allá voy encontrando. “La realidad, es a lo que prestas atención”. Mi preocupación es claramente sesgada. Si en vez de sobre estos temas estas, leyera el ¡HOLA!, claramente pensaría otras cosas.

 El clima no evoluciona de una manera dramática día a día… Sí, es verdad que este año puede que acabe siendo el más cálido desde que tenemos datos, más incluso que el anterior que también lo fue, pero por lo menos en el entorno en que me muevo, no parece que esto sea un problema. Más bien al contrario. Tanto es así que el negacionismo del cambio climático cada vez toma más fuerza entre amplios sectores de la población. Cuando lees estudios científicos este negacionismo te parece aberrante y eso me hace preguntarme por qué no hay mayor preocupación.

  «Es difícil hacer que un hombre entienda algo cuando su salario depende de que no lo entienda» decía el escritor y activista estadounidense Upton Sinclair . Quien dice su salario, dice su nivel de vida, sus caprichos, su negocio. Y es que el cambio climático, de origen antropogénico, tiene este problema para ser entendido. La economía capitalista se basa en "el más" y se mueve, nos guste o no, por el consumo de energía, cada vez más creciente , de una energía barata, (hasta ahora) y al parecer inagotable. El uso de esa energía desprende, nos guste o no, calores residuales y emisiones  de gases de efecto invernadero que a su vez crecen con el crecimiento económico, siendo éste imprescindible para la buena salud del capitalismo. Es decir que “morir de éxito” es a lo que al parecer estamos destinados. Entiendo que la frase de Sinclair resume a la perfección uno de los motivos del negacionismo. Negacionismo -practico- que  no sólo exhiben los gobiernos o grandes empresas, sino que el currito medio que viaja en avión por 70 euros o se va el fin de semana con su coche a la playa,  con su coche que está pagando a plazos. De alguna forma todos participamos en la fiesta y nos sentaría muy mal que la fiesta se acabe, o sea menos divertida ¡"con la cantidad de impuestos que pagamos"! Como cuando fumamos, hay cantidad de argumentos para dejar esta adicción, (porque es una adicción), para romper la disonancia cognitiva que nos corroe, pero estos argumentos son racionales, sus resultados positivos, (¡muy positivos!) se ven a largo plazo, pero a corto plazo suponen negarnos un placer. "Ningún argumento racional tendrá un efecto racional en un hombre que no quiere adoptar una actitud racional" decía K. Popper 

Si los individuos, la sociedad, la economía, toma las medidas que realmente son necesarias para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, tendríamos que renunciar a una cantidad tremenda de cosas y servicios, que consideramos imprescindibles, que nos dan tremendas satisfacciones a corto plazo, en aras a un mundo habitable para las próximas generaciones, a lo mejor tan próximas como la de nuestros nietos, (esos que adoramos...). No echemos la culpa a los poderes económicos, que se mueven por la rentabilidad, sin pensar en las consecuencias negativas a nivel medioambiental y/o social, que esa rentabilidad a toda costa tiene para el entorno. Esas compañías nos ofrecen productos y servicios que son ávidamente consumidos por nosotros. Cierto que esta avidez consumista está basada en un entorno social que lo promueve e ignora las consecuencias, ¿pero queremos conocer las consecuencias de nuestros hábitos consumistas? ¿Han intentado, armándose de valor,comentar estos aspectos en sus reuniones familiares o con amigos?.

La sociedad no está preparada para aceptar esta información de forma que cambie su actitud y es lógico, porque en un mundo basado en el "¿y yo que gano con esto?", con "esto" se pierde calidad de vida y amistades. La evolución hacia el colapso, aunque creo que se está acelerando en estos últimos año, aún tiene una velocidad muy lenta comparada con la generación y satisfacción de los deseos. Podemos seguir actuando como siempre "lo quiero y lo quiero ya", gracias a la cantidad de aplicaciones y entidades que nos "informan" de sus productos y servicios y los mecanismos para que el tiempo entre la generación de un deseo y su satisfacción sea lo más corto posible y NO VEMOS que esta actitud produzca un efecto negativo inmediato, como pasa al encender un cigarrillo (tras otro) y la aparición de un cáncer. Esta diferencia de tiempos unida a lo poco apetecible que nos parecen las medidas de contención hacen que no nos sensibilicemos ante el problema. Meter los dedos en un enchufe, en cambio, si que produce un efecto desagradable e inmediato que hace que no veamos a muchos "adictos al enchufe"


 Creo que ente tema es perfectamente  aplicable la "Ventana de Overton" . 

En un determinado momento, las políticas  aplicables sólo son posibles si gozan de la aceptación y la popularidad de la sociedad. Overton dividió las políticas en diferentes niveles verticales desde más libertad, por arriba, a menos libertad por abajo. Estos niveles son Inaceptable, radical, aceptable, sensato, popular, Política y los mismos niveles en sentido contrario. Políticos que propugnen ideas que no sean populares en la sociedad, (cuya actitud está moldeada todos los días por el mercado y su propaganda) están condenados al fracaso. Por eso, los políticos elegibles procuran no tocar estos temas, o tocarlos de forma muy suave y nada comprometida, ya que de aplicar las medidas medioambientales necesarias, implicaría una pérdida de popularidad radical que los alejaría del poder. Obviamente la ventana se puede mover hacia una dirección u otra pero siempre de forma gradual. Hay definidas estrategias para ello Cuando tienes cierta edad, has visto cambios radicales en nuestra sociedad, (en plazos de años o décadas), que han convertido en populares y aceptable socialmente, situaciones y políticas que en su momento eran inadmisibles. Hay estrategias para ello, pero son costosas y precisan tiempo. 

Sólo cuando los efectos ambientales de nuestra actitud sean inequívocamente visibles y claramente relacionados con ella por una suficiente masa crítica de la sociedad, empezaran a entrar "dentro de la ventana", pero ya será tarde



sábado, 10 de junio de 2023

Por Castilla la Vieja


 Ultimas luces.

Esta noche tampoco 

habrá estrellas...


                         Alargan los días

                 El tañir de la campana

                         da las ocho